🚚 Envío gratuito en pedidos superiores a 99EUR

Lectura semanal

17 de noviembre – 23 de noviembre

Cita para reflexionar esta semana

“Aférrate a la voluntad de Dios”.

Santa María MacKillop

Ofrenda de la mañana

Oh Jesús, por el Inmaculado Corazón de María
Os ofrezco mis oraciones, obras, alegrías y sufrimientos de este día
por todas las intenciones de tu Sagrado Corazón
en unión con el Santo Sacrificio de la Misa en todo el mundo,
para la salvación de las almas, la reparación de los pecados, la reunión de todos los cristianos,
y en particular por las intenciones del Santo Padre este mes.
Amén.

Artículos que le pueden interesar

Lectura de la semana

¿Qué respuesta se dará a los mensajeros de esa nación? Pues que el Señor ha afirmado a Sión, y que allí se refugiarán los afligidos de su pueblo.

Isaías 14:32

Oración de la semana

Señor nuestro Dios, tú eres nuestro refugio. Esperamos en ti, porque tu propósito nunca fallará y tu promesa se cumplirá. Creemos esto con firmeza, y es la fuente de nuestra fortaleza cada día. Aun cuando nuestra vida pase por penas, no queremos afligirnos. Queremos esperar, creer y perseverar hasta que llegue tu día. Tu reino vendrá a la tierra y mientras tanto tú cuidas de tu pueblo. En medio de los sucesos cotidianos del mundo habrá personas que esperan en ti, que te pertenecen, y que están firmemente arraigadas en la gracia de Jesucristo hasta el cumplimiento del tiempo. Amén.

Lecturas de Hoy

XXXIII Domingo ordinario

Primera lectura

Dn 12, 1-3


En aquel tiempo, se levantará Miguel, el gran príncipe que defiende a tu pueblo.

Será aquél un tiempo de angustia, como no lo hubo desde el principio del mundo. Entonces se salvará tu pueblo; todos aquellos que están escritos en el libro. Muchos de los que duermen en el polvo, despertarán: unos para la vida eterna, otros para el eterno castigo.

Los guías sabios brillarán como el esplendor del firmamento, y los que enseñan a muchos la justicia, resplandecerán como estrellas por toda la eternidad.

Salmo Responsorial

Salmo 15, 5 y 8. 9-10. 11


R. (1) Enséñanos, Señor, el camino de la vida.
El Señor es la parte que me ha tocado en herencia:
mi vida está en sus manos.
Tengo siempre presente al Señor
y con él a mi lado, jamás tropezaré. R.
R. Enséñanos, Señor, el camino de la vida.
Por eso se me alegran el corazón y el alma
y mi cuerpo vivirá tranquilo,
porque tú no me abandonarás a la muerte
ni dejarás que sufra yo la corrupción. R.
R. Enséñanos, Señor, el camino de la vida.
Enséñame el camino de la vida,
sáciame de gozo en tu presencia
y de alegría perpetua junto a ti. R.
R. Enséñanos, Señor, el camino de la vida.

Segunda lectura

Heb 10, 11-14. 18


Hermanos: En la antigua alianza los sacerdotes ofrecían en el templo, diariamente y de pie, los mismos sacrificios, que no podían perdonar los pecados. Cristo, en cambio, ofreció un solo sacrificio por los pecados y se sentó para siempre a la derecha de Dios; no le queda sino aguardar a que sus enemigos sean puestos bajo sus pies. Así, con una sola ofrenda, hizo perfectos para siempre a los que ha santificado. Porque una vez que los pecados han sido perdonados, ya no hacen falta más ofrendas por ellos.

Aclamación antes del Evangelio

Cfr Lc 21, 36


R. Aleluya, aleluya.
Velen y oren,
para que puedan presentarse sin temor
ante el Hijo del hombre.
R. Aleluya.

Evangelio

Mc 13, 24-32


En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Cuando lleguen aquellos días, después de la gran tribulación, la luz del sol se apagará, no brillará la luna, caerán del cielo las estrellas y el universo entero se conmoverá. Entonces verán venir al Hijo del hombre sobre las nubes con gran poder y majestad. Y él enviará a sus ángeles a congregar a sus elegidos desde los cuatro puntos cardinales y desde lo más profundo de la tierra a lo más alto del cielo.
Entiendan esto con el ejemplo de la higuera. Cuando las ramas se ponen tiernas y brotan las hojas, ustedes saben que el verano está cerca. Así también, cuando vean ustedes que suceden estas cosas, sepan que el fin ya está cerca, ya está a la puerta. En verdad que no pasará esta generación sin que todo esto se cumpla. Podrán dejar de existir el cielo y la tierra, pero mis palabras no dejarán de cumplirse. Nadie conoce el día ni la hora. Ni los ángeles del cielo ni el Hijo; solamente el Padre’’.

Este devocional gratuito fue presentado por:

Loja Esperança
Imágenes Rosarios Joyería Regalos
Imágenes Rosarios
Joyería Regalos

Hecho a mano en Fátima - Entregado en todo el mundo